Descripción
El León (o leona, para las hembras) es un mamífero carnívoro, familia de los félidos como el tigre, el jaguar, o el leopardo.
Para su supervivencia lo más difícil es la infancia, cuando son más susceptibles a otros depredadores; luego de ésto, la hembra puede llegar a vivir entre 12 y 14 años, mientras que los machos solo viven alrededor de 8 años.
En comparación con los otros félidos son animales sociales, lo que significa que son los menos agresivos entre miembros de su propia especie.
Los machos son uno de los animales más fáciles de distinguir: poseen una característica melena ampliamente popular entre la cultura humana; de hecho, el león se puede encontrar en la literatura, pintura, películas, y otros medios. De resto, tanto la hembra como el macho poseen un pelaje de color marrón amarillento a lo largo del cuerpo, a excepción de las partes inferiores que suelen ser más claras.
Características
Son el segundo félido más grande, después del tigre, y los únicos cuya diferencia visual entre la hembra y el macho es fácilmente apreciable.
Su peso varía entre los 150 y 250 kg para los machos; en las hembras, entre 120 y 182 kg. Además, miden entre 1,7 y 2,5 metros de longitud en los machos; y en las hembras, de 1,4 a 1,75 metros (sin contar la cola). Asimismo, ambos sexos tienen un poco más de un metro de altura.
Estos mamíferos descansan en promedio 20 horas al día; aunque pueden ser activos a cualquier hora del día, comúnmente son más activos al final del día. Las hembras son las encargadas de prácticamente toda la caza de presas, por ser más pequeñas, ágiles, veloces, y sigilosas.
Organización
Los leones tienen 2 formas de organizarse:
- Residentes o En manadas: el grupo consiste en 5 o 6 hembras adultas con sus crías. Además, 1 o 2 machos adultos. En algunos casos se han visto grupos de hasta 30 miembros.
- Nómadas: se mueven constantemente por distintos territorios, solos o en pareja. Es normal que un león cambie su estilo de vida entre Nómada y Residente o también viceversa, a lo largo de su vida.
Hábitat
Los leones se encuentran en el sub Sahara de África y Asia. Frecuentemente se le ha reconocido como el «Rey de la Selva»; sin embargo, en la selva no habitan leones. Éstos viven en sabanas, en zonas extremadamente secas y calurosas.
Ellos solo cambian de ubicación hacia zonas donde nunca habían vivido, cuando los animales de los que se alimentan también se desplazan a nuevos ambientes; ésto sucede principalmente por la intervención de los humanos en su hábitat y por la destrucción del medio ambiente.
Alimentación
Estos animales cazan principalmente Ñus, Cebras, Gacelas, Antílopes, y en algunos casos, Rinocerontes. En muchas ocasiones son carroñeros, por lo que roban presas muertas a Hienas y Buitres.
Sus presas pueden alcanzar los 500 kg de peso, preferidas principalmente para que la manada completa coma; a pesar de ello, pueden cazar animales pequeños como roedores o liebres, principalmente los leones nómadas.
Estos depredadores alcanzan hasta 58 km/h de velocidad, por lo que en caso de encontrarse con presas más rápidas como la Gacela, que alcanza los 97 km/h, deben utilizar la estrategia y agilidad para contrarrestar la desventaja.
Reproducción
No existe una época en especial de apareamiento; normalmente ocurre cuando el alimento es más abundante.
Las hembras están listas para reproducirse aproximadamente a los 4 años, y los machos, a los 3 años. El período de gestación (mientras se desarrolla el cachorro león y nace) dura 110 días.
Dan a luz en una cueva lejos de la manada, y paren entre 1 y 4 cachorros. Aproximadamente luego de 2 meses las madres regresan con su manada, y los cachorros dejan de necesitar de lactancia materna entre 6 y 7 meses luego de nacer.
Aproximadamente el 80% de los leones mueren antes de llegar a los 2 años de edad.
Amenaza
Los leones, en su adultez, tienen pocos enemigos naturales. Su principal competidor son las hienas, quienes en grupo pueden fácilmente robarle sus piezas cazadas. Los cachorros también pueden ser cazados por hienas, e incluso en su adultez los leones pueden resultar fatalmente heridos por un Ñú o un Búfalo.
A pesar de sus pocos enemigos naturales, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza ha clasificado a los leones como Vulnerables, lo que significa que comienzan a estar amenazados de extinción, principalmente a causa del hombre, que poco a poco ha ido destruyendo su hábitat.